La disciplina es un valor que se aprende y se cultiva, no se nace con él. Es mucho más que estar calladito en clase y ser obediente.
Una persona disciplinada habla por sí misma, se deduce lo responsable que es para organizar su tiempo, sus actividades y está al pendiente de cumplir con sus obligaciones. Su palabra es sinónimo de garantía y credibilidad ante los demás.
La disciplina es un entrenamiento que corrige, moldea, da fortaleza y perfecciona. Su misión es formar buenos hábitos y establecer una serie de reglas personales que te comprometan contigo mismo para alcanzar un ideal. La disciplina es probablemente el único camino que existe para llegar a las metas mas altas y ambiciosas, como la danza por ejemplo.
“La distancia que existe entre los sueños y la realidad es la DISCIPLINA"